EL RUISEÑOR, EL AMOR Y LA MUERTE.
Al ir entrando en el mundo de "El Ruiseñor, el amor y la muerte", comencé a sentirme atrapado en un mundo de sensaciones, como en cada disco del Indio Solari. Esta vez con una paleta de sonidos que en cada una de sus canciones, te envuelve e hipnotiza. Cada tema es una historia, una película, una parte hermosa y dolorosa de este mundo ensordecedor que vivimos. Vale la pena aclarar que no estoy tratando de descifrar una canción, solamente contar sensaciones para sacar de adentro todo lo que Solari me genera con sus letras. Ya saben, todo lo que uno vive y siente con los temas del Indio, son personales y tan válidos como los que puede sentir otra persona, sin importar cuan fanático seas o cuantas misas hayas presenciado. La poesía es un universo que nos genera diferentes viajes a cada uno de nosotros y eso es lo más bello de este artista.
Cap. I: "Pinturas de Guerra"
"Es una baladronada. Porque cuando me muera no voy a poder hacer nada, pero de todos modos lo digo, me anticipo: una vez que esté muerto, váyanse todos a la concha de su madre. Una guapeada hecha y derecha, Es que me están rompiendo mucho las pelotas... ¡Me tienen arrinconado!
Me harta la gente que miente siempre a gusto del poder..."
Indio Solari, extracto de "Recuerdos que mienten un poco".
"En Pinturas de guerra -un arranque abrasivo, que contagia el ánimo batallador- se imagina fantasma, volviendo de la muerte para enfrentarse a *esos jodidos* que *siempre tienen a mano / las más tonta razones / para mentir a gusto del poder*", Marcelo Figueras para "El cohete a la luna", de su nota "Un gran remedio para un gran mal"
"Cuando ya abandone mi nombre
a merced de miserables, Ay!
Tal será mi vergüenza
que enviaré mi fantasma
a librarme de ellos"
Lo que uno nunca sabe cuando empieza a entrar en las canciones del Indio es cuando las escribió, en que momento de su vida, si son recientes las letras o las trae desde el pasado, porque cada uno de sus escritos es atemporal y son válidos en cualquier época y para cualquier ser humano. Lo que hemos vivido en 2017, los ricoteros, Los Fundamentalistas y en especial el Indio Solari, fue un ataque despiadado de la prensa y los medios a su persona, a las bandas. La misa de Olavarría que para muchos, la gran mayoría, fue una noche soñada; para los medios fue una excusa perfecta para caer con toda su ira sobre la imagen de Solari. Porqué? Porque cuando te metes con los poderosos, justamente esos medios, van a buscar cualquier excusa para verte en el piso.
En esta canción, "Pinturas de guerra", el Indio parece vencido. No voy a mentir, cuando leí por primera vez "El Ruiseñor", pensé que era una triste y dolida despedida. Pensamiento que tire por la borda cuando veo que Solari en sus redes todo el tiempo está creando. Porqué despedida? El "cuando ya abandone mi nombre", me sonó simplemente a cuando deje de ser Indio y vuelva a ser Carlos. Cuando ya no sea más el artista y sea solo el padre de Bruno. Cuando separe mi persona del artista y que El Indio quede a merced de esos medios miserables, solo quedará la vergüenza y sólo puede librarse de ellos cuando ya no este sobre esta tierra...
"Con pinturas de guerra
volveré a dar batalla
Si la adversidad triunfa
dolerá porque fui feliz"
Ahora con estas "pinturas de guerra", con estas canciones, el Indio vuelve a dar batalla, vuelve al paño, sale nuevamente al campo de juego a pelear, a tirar sus frases, esas que llevamos en la piel, en las banderas. Esas frases que adornan paredes en los barrios más marginales del país, esas que nos enamoraron del Indio, vuelven a aparecer en este disco. Y acá tenemos una de esas que será remera seguramente: "Si la adversidad triunfa, dolerá porque fui feliz". Si perdemos ante estos poderosos, si caemos ante ellos, el único dolor son esos recuerdos de los momentos que vivimos y nos hicieron tan felices. Si llevamos la frase al amor, no es más que pensar en una separación y el dolor mayor de la separación es solamente pensar en los bellos momentos que vivimos juntos.
"Fuimos tan graciosos
y también tan valientes
que aún reímos"
"De esa letra rescato la inclusión del graciosos y valientes, la fórmula que me gusta usar cada vez que brindo con alguien" esto lo dice el Indio en "Recuerdos que mienten un poco". No es más que eso, brindar y brindar. Y celebrar. Festejemos, con nostalgia, pero festejemos.
"Todos esos jodidos
que 'retienen la vida
un poquito nada más'
Siempre tienen a mano
las más tontas razones
para mentir a gusto
siempre a gusto del poder"
"Las más tontas razones", no hay razón más tonta que el dinero para vender los ideales. Esos "jodidos", siempre fueron los periodistas, anteriormente llamados "mula de la enfermedad", retienen la verdadera información y despliegan mentiras 24 x 7 para que el poder real no se vea afectado. Así mientras el poder tenga a los medios comprados, la realidad solo está en la calle, en este caso en la misa. Todos los que fuimos a la última misa tuvimos una experiencia hermosa, sin embargo al mismo tiempo que nosotros salíamos aún festejando del predio, el resto del mundo devoraba la sangre que chorreaba de las pantallas. Olavarría era tendencia mundial por la cantidad de muertes que habían sido inventadas por un medio de prensa que ni siquiera estaba en el lugar, y mientras nosotros descorchábamos una cerveza entrando al hospedaje que tan bien nos trató. Lo único real fue lo que soñamos.
"Pinturas de guerra"
Este es el inicio de este viaje de 15 capítulos que el Indio Solari nos dejó en 2017. Así arranca, con un golpe a los medios que mintieron y siguen mintiendo, manejados por los poderosos y con la capacidad económica para crear un mundo paralelo donde ellos son los buenos y nosotros los malos. La verdadera grieta es esa, los que creen en los medios y los que sentimos la realidad.
"Pinturas de Guerra", del canal Redondos Subtitulados
