Las tribus comienzan su peregrinación muy allá en el tiempo, cuando los
demás pares indígenas comienzan a transmitir de boca en boca las buenas nuevas: Una inminente aparición del jefe "toro fumado opiaceo y regalón", nuestro querido
héroe único "Crazy horse" (o caballo loco, en su traducción traída
por aquellos perfumes de las tempestades, esas tormentas que ya quedaron
lejanas en 2011). Allí las huestes ricoteras, conocidas anteriormente como
"redonditos de abajo" o guerreros "sioux", comienzan sus
preparativos para el gran ataque, que como todos sabemos, siempre puede ser el
único.
Mas allá de la ferocidad de estos soldados, todo puede acabar pronto y en
cada pequeña muerte volvemos a renacer y tomar mas fuerza para que esas
tempestades privadas, saquen del interior las ganas de demostrar el coraje,
valentía y bravura con la que estos ricoteros salen a los caminos.
Todos vamos cargados de fundamentalismo, infiltrados con esa dosis de aire
(a)condicionado por la poesía del Caballo, que nos llama a unirnos en el ritual
mas importante de nuestras vidas. Todos galopando corazones emocionados por la
sociedad actual que nos peligra y nos azota. Esta vez los otoños entrerrianos
nos esperan, con esa inesperada mezcla de climas propios de las corrientes
uruguayas, los vendavales del norte que atraviesan vientos salteños con
recuerdos de aquellas primeras batallas del 78. Llegarán también los fríos del
sur, cargados de sus miradas heladas pero sus almas ardientes que calman la
dureza de la gélida patagonia. Vendrán aquellos guerreros del oeste, locales en
la ultima guerra, conocedores del suelo y las provisiones liquidas que nos
deleitaron y calmaron nuestra sed en esa encrucijada mendocina.
Se aproximan los indios rosarinos impulsores de la masividad de los 90, no
faltaran aquellos serranos virtuosos elegidos para la misión final del rey
Patricio, se unirán a los porteños cruzando el río a toda mostaza y su potencia traídas desde las tribus suburbanas. Todos congregados para esta guerra..
Unidos en una procesión de 3 jornadas que permite perpetuar esta
ideología, por fuerza de nuestros espíritus libres, dominamos este mundo
redondo y dejamos nuestro sello en cada ciudad donde emprendemos batalla.
Las provisiones de algunos Indios están listas, otros mas descuidados salen
al campo de batalla con su alma y nada mas. Poco importa, el llamado de Caballo
Loco está, en medio del enfrentamiento sabremos compartir para subsistir y
llegar de la mejor manera al momento culmine de la pelea: "el pogo".
Las peregrinaciones llegan de todos lados, sur, norte, este y oeste.
Atraviesan continentes, océanos y todo lo que se cruce en su camino. Cuando el
corazón llama, no importan las distancias ni los obstáculos, desde los mas
pequeños futuros guerreros, hasta los mas ancianos caciques cargados de mil
batallas, se encuentran en esta misa.
El grito de guerra comenzó a sonar, las tropas ya están casi listas,
esperando el día del viaje. El doce de abril, el cielo nos vera opacar su brillo, la
tierra se rendirá ante nuestros pies y todos aquellos que hayan nombrado o
escuchado nombrar alguna vez a este jefe Indio Caballo Loco, volverán a sentir
el rugido de sus tribus.
Unas pocas palabras darán inicio al ritual y luego de eso, las 200 mil
almas guerreras comenzaran a atacar dejando sus almas desangeladas en este campo de batalla...
"Sus ritmos al cantar,
me obligan al ritual,
en lengua angélica que arde.
Me quieren encantar,
con ruidos mágicos,
y trinos llenos de misterio.
me obligan al ritual,
en lengua angélica que arde.
Me quieren encantar,
con ruidos mágicos,
y trinos llenos de misterio.
Todos esos sonidos que parecen un mix de
gritos y sonidos autóctonos indígenas que escuchamos al comenzar cada recital
del Indio Solari, es nada mas y nada menos que la danza guerrera utilizada por
los Indios Sioux. Este grupo vivía en el norte de Estados Unidos, reconocidos
por su bravura en la lucha cuerpo a cuerpo, asesinos implacables que a sus
derrotados solían arrancarle las cabelleras (los de mas de 30 recordaran los
western de los 80 y mas atrás en su época de gloria en el cine de los 70). Además
de tener lengua propia comenzaron a darle uso al caballo, llamaban a los
blancos wasicus (perros ladrones) y rápidamente comenzaron a usar las armas de
fuego, lo cual le dio mas poderío en las guerras contra los blancos. Su
autoridad era el chamán, indiscutible y entre sus jefes mas importantes estaban
“Toro Sentado”, “Nube Roja”, “Alce Negro” y el denominado “Caballo Loco”,
llamado así por haber soñado con un caballo salvaje. Aquí es donde se une nuestra
historia ricotera con la historia Estadounidense. El Indio Solari en su tercer
disco “El perfume de la tempestad” se auto denominó “Caballo loco”, tomando el
nombre de este, el mas importante de los líderes Sioux. Junto a Toro sentado y
Nube roja, formaron una alianza para defender su pueblo del ataque colonizador
estadounidense, y lograron vencer al ejército propinándole una de las mas duras
derrotas que hayan recibido en la guerra de Nube Roja, denominada por los
Yankees “masacre de Fetterman”. Este líder
tanto espiritual como guerrero llevó a la tribu Sioux a una victoria frente a
los soldados y a pesar de que con el tiempo fueron vencidos, quedó en el
recuerdo del pueblo indio americano y tiene su monumento en “Black Hills”, en
Dakota del sur, donde habitaban estos nativos, el “Crazy Horse Memorial” o
monumento al caballo loco. Además de esto, en cada una de las misas Indias
donde nos convoca, Solari utiliza como apertura la Danza de guerra de los
Sioux, allí es el momento preciso donde nuestros corazones se aceleran al máximo
y esperan el estallido final que da pie al comienzo de la misa y nos quita la
incertidumbre de “con que tema arrancará”, hecho no menor, ya que en diferentes casos especiales, queda grabado
en nuestras memorias para siempre (“Fuegos de Oktubre” en Salta 19-09-09, “Jugo
de Tomate frío-Un tal Briggitte Bardot” en Tandil 13-11-10, “Luzbelito y las
sirenas” en Mendoza 14-09-13)
Video Luzbelito y las sirenas Mendoza 2013
http://youtu.be/i2pzpwVwbPw